Giuseppe Vicente: "Como creador audiovisual siempre quieres dejar algo que trascienda"

10.03.2021

Por Angie Enciso

Conversamos con Giuseppe Vicente director de "El cuento de Togashi" cortometraje seleccionado para el FACIUNI becas, 

Este año el Festival Académico de Cine Universitario Internacional (FACIUNI becas) cuenta con un cortometraje peruano dentro de sus finalistas. Giuseppe Vicente, egresado de la carrera de Comunicación Social por la UNMSM se encuentra participando por una beca para estudiar Cine en Estados Unidos. Este corto animado nos narra una parte de la historia del Perú al que pocas veces se le hace énfasis en las escuelas. En Ardid Cultural tuvimos la oportunidad de conversar con su director. 

Giuseppe, actualmente te encuentras participando en el Festival Académico de Cine Universitario Internacional (FACIUNI), cuéntanos ¿Cuál fue tu punto de partida?

Considero que muchas cosas llegaron antes y me sirvieron para realizar este cortometraje. En uno de mis cursos en San Marcos nos tocaba realizar una radio novela, decidí trabajar el tema de la Segunda Guerra Mundial, este fue un primer acercamiento que tuve a la temática que abordo en el corto. También el hecho de estar haciendo la tesis me hizo investigar sobre la identidad nacional en un producto audiovisual. Además, ya estaba familiarizado con los talleres que ofrecía el Peruano Japonés. En el 2019 que se realizó el Laboratorio Audiovisual de Expresión Múltiple, se celebraban los 120 años de la migración Nikkei, por ese motivo todos los cineastas que fuimos invocados debíamos incluir en nuestro proyecto una referencia a la cultura japonesa o al poeta peruano de ascendencia japonesa, José Watanabe. Desde el inicio sabía que "El cuento de Togashi" tenía que ser contado a partir de una mirada infantil para que pueda ser más didáctico. Mi amigo me convenció de hacerlo bajo la técnica del stop motion por el hecho de tocar la guerra ya que los espacios de Japón no se podían realizar en live action.

Del trabajo de Watanabe ¿qué referencias agregaste a tu obra?

Hay dos poemas realmente escondidos de él que me sirvieron de inspiración, "Regresando al Perú en barco" y "Las manos". Esta última es casi un calco que se encuentra en la frase con la que culmina Togashi, cuando habla de que sus familiares le regalaron estas manos y así el futuro de los Nikkei seguirá en el Perú.

En torno a ello, ¿Cuál crees que es el discurso más fuerte que maneja El cuento de Togashi?

Como comunicador audiovisual quiero mostrar que en el Perú somos de varias sangres, el que no tiene de inga tiene de mandinga. Justo en este periodo de la historia, la migración Nikkei abarca cierta xenofobia, racismo, discriminación a quien es diferente. En la actualidad todavía vemos que al que es diferente a ti lo alejas. Por ello es importante saber respetar todas las culturas.

¿Tenías planeado presentar este corto para el FACIUNI o después de trabajar el guion en este laboratorio se te presentó la oportunidad de postular tu proyecto?

Togashi es el sexto cortometraje que yo hago, desde el primer corto he enviado mis trabajos a todos los festivales chiquitos o grandes que he podido pero muy pocos han entrado. Con respecto a FACIUNI, es la tercera vez que postulo y en esta oportunidad fui aceptado. Pasamos la fase local y ahora estamos en la internacional, gracias al voto de público esperamos también ganar esta última etapa.

Vale agregar que San Marcos ha ganado un bono a partir de que el corto quedó seleccionado en la fase nacional, esto permitirá hacer crecer la Escuela de Comunicación Social y esperemos que las autoridades utilicen bien el dinero y puedan quizás construir un estudio televisivo, comprar más cámaras, traer mejores asesores, entre muchos otros.

Tuviste que dosificar tu trabajo porque se acercaba la fecha límite para postulación al FACIUNI, ¿Cuánto tiempo te tomó la realización de este cortometraje?

Teníamos cerca de dos meses, entonces concentramos nuestra atención en lo que era más interesante y curioso. Nunca había hecho stop motion, por ello convoqué a mis amigas para que me ayudaran con ello. Para realizar el guion y una serie de storyboards empleamos las primeras dos semanas, durante el mes de enero del 2020 nos reunimos con el equipo y comenzamos a hacer las maquetas junto con los personajes. A partir de febrero realizamos la sesión de fotos con las maquetas y la postproducción, la edición duró tres días. Para el tema de las escenas, primero se realizó el shashin kekkon que era una suerte de matrimonio concertado, luego la intervención peruana en la Segunda Guerra Mundial y al final el dekasegi una migración de grandes magnitudes que hicieron los japoneses regresando a su tierra debido a la crisis económica que se vivía aquí.

¿Quiénes formaron parte de tu equipo para llevar adelante este proyecto?

La gran mayoría son sanmarquinos: Stacy Sotecani, Narda Gómez, Katia Pérez y mi mejor amigo, Paul Gonzales, quién a pesar de no ser de la universidad me ha apoyado en todas mis creaciones. Los menciono a todos porque una producción audiovisual no es solamente la visión de uno sino es siempre un trabajo en conjunto. El director tiene que saber sumar las ideas y puntos de vista de su equipo para que el producto salga lo mejor posible.

A lo largo de tus creaciones audiovisuales, ¿Cuál crees que ha sido el reto más grande al que te has enfrentado?

Definitivamente Togashi ha sido el más grande, porque siempre presentaba cortos para el fin de ciclo con los compañeros de clase para algún curso en la universidad. Pero en el Laboratorio Audiovisual uno se iba a registrar como director con su nombre completo y sabías que tu trabajo se iba a exhibir más veces, eso te motivaba a ponerle más ganas. Como creador audiovisual siempre quieres dejar algo que trascienda.

Para los jóvenes que al igual que tú tienen interés por realizar productos audiovisuales pero muchas veces no saben por dónde empezar, ¿Qué les podrías decir?

Esta es la pregunta a la que quería llegar (risas). Pierdan el miedo, algunos piensan que haces tu proyecto universitario únicamente por nota, pero puedes agregarle un valor personal. Siempre escucha las ideas de todos, a veces pasa que cuando acaba el rodaje terminas peleado con tus compañeros. El ego nunca ayuda, el ego mata proyectos. Además, hay un montón de cosas que a uno no le enseña la universidad, pero debe saberlo. Por ejemplo, siempre graben un making of de sus propuestas porque hay festivales que los solicitan, desde la preproducción ir trabajando un póster, hacer una suerte de ficha técnica para saber en qué rol va a estar cada miembro del equipo. Hay que ser organizados, hacer storyboards, si no sabes dibujar puedes hacer una lista de planos para hacer los fotogramas clave. Si me preguntas como guionista, hay que pensar cómo audiovisual a través de transiciones y sonido. Practicar un stop motion ayuda bastante a conocer las demás ramas del cine.

Palabras finales que quieras compartir con el público...

Que intenten buscar las historias que no son contadas pero que les importan, piensa en que tu proyecto puede salir a representar al Perú. El medio es el mensaje. Finalmente invitarlos a que voten por "El cuento de Togashi" en la página web para poder apoyarme en la continuidad de mi formación audiovisual. 

¡Muchas gracias!

¡A ustedes!

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